Una sonrisa, un mensaje, palabras, palabras y mas palabras, cuentos al oído y silencios nerviosos que inquietan, distancias llenas de ausencias generadoras de mil y una historietas, tal vez, todas ficticias…
Cierro los ojos y todo se mueve dentro de esta arquitectura que me lleva a no dejar de sentir que estoy viva, porque me permite que vea, escuche, rectifique, piense, atienda y vuele alto … y lo principal, la cultura hace que la inteligencia funcione, aunque el miedo a lo desconocido me haga pensar a ratos que pueda ser una arquitectura efímera.
Pero apuesto fielmente a esto que me resulta atrayente en su conjunto, porque lo considero una construcción original y única, exquisita en las formas y en los modos, sugerente en cada instante, con insinuantes rincones por descubrir …
Solicito una atención especial que no pase por ser inventada, aseguro está en la estructura original, y deseo percibirla en su estado mas natural …
El sacrificio y el egoísmo.
Hace 3 años
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